En cinco o seis zonas criminógenas de la ciudad de México, la Secretaría de Seguridad Pública local instalará las cámaras de video que cuentan con detectores de disparo que permitirán identificar enfrentamientos o actos delictivos. Estas cámaras de video, que serán adquiridas como parte de las ocho mil del proyecto Bicentenario, contarán con esta función que permitirá a la policía detectar por la intensidad y los decibeles si se trata de un arma o un cohete.
Como parte de estas características, las cámaras podrán girar al lugar de donde se emita el sonido para identificar a posibles grupos involucrados en presuntos actos delictivos, alteración del orden o hechos indistintos.
Las nuevas cámaras de video también tendrán la capacidad de poner en marcha un sistema de inteligencia en la policía, a través del reconocimiento de disparo de arma de fuego y la detección de intrusión, es decir, a través de críoceldas que lanzarán alertas si alguna persona rebasa líneas permitidas de seguridad, horarios en algunas zonas en específico.
La inteligencia del sistema soportará aplicaciones como el reconocimiento de huellas digitales y de voz. Se instalarán 31 cámaras en estaciones del
STC- Metro que tendrán la capacidad del reconocimiento de rasgos faciales, a fin de detectar a aquellos delincuentes que cuentan con antecedentes penales, órdenes de aprehensión o son prófugos de la justicia en cualquier estado de la República, pues estará conectado a la base del
Sistema Nacional de Seguridad.
Estos aparatos de video que se instalarán en tres fases también podrán detectar objetos abandonados en la vía pública y que puedan representar algún riesgo para la ciudadanía. Ubicarán también concentraciones de personas y emitirán el reporte correspondiente a la policía.