Hay una serie de razones por las que fuertes medidas de identificación son necesarias en el sector de la salud. Asegurarse de que el registro electrónico esté conectado al paciente correcto sería la primera razon, pero también está el creciente delito de robo de ID médico, según un informe dado a conocer de la Smart Card Alliance.
"Muchas autoridades consideran que el robo de identidad médica es uno de los delitos de mayor crecimiento en EEUU", señala el informe. Cerca de 1,5 millones de estadounidenses han sido víctimas de robo de su identidad médica con un costo total estimado de 28,6 mil millones de dólares, aproximadamente 20000 dólares por víctima, según un reciente estudio del Instituto Ponemon.
Los pacientes cuyas identidades son robadas médicos se enfrentan diversos efectos, a largo plazo. Es que, fraudulentos eventos de salud pueden dejar datos erróneos en los registros médicos. Esta información incorrecta de datos (sobre análisis, diagnósticos y procedimientos de atención) puede tener un impacto futuro sobre la cobertura del seguro y los costos.