ESET y Symantec realizaron un sondeo para conocer el estado del arte en el que se encuentra la seguridad informática en la región de América Latina, y principalmente en el Argentina, y coincidieron en que si bien aumentó la preocupación de los ejecutivos por estar protegidos de cualquier ataque a sus redes e información, aún falta trabajar en tres pilares: tecnología, gestión y educación.
Según los datos recolectados por Applied Research son las pequeñas y medianas empresas las que siguieron invirtiendo en sistemas de protección a pesar de la crisis económica, y en promedio el monto anual desembolsado llegó a los 51 mil dólares. En la región entrevistó a 2.152 PyMEs, de las cuales 39 eran argentinas. Por su parte, ESET Latinoamérica aprovechó la realización de Segurinfo 2010 para encuestar a 532 ejecutivos con cargos jerárquicos, quienes pusieron a la pérdida de datos como su principal preocupación en lo que refiere a seguridad informática (51,63%), y relegaron a los fraudes internos al segundo lugar, con el 41,11%.
El análisis de Symantec coincidió en el primer lugar (54%) pero no dio cuenta de cuestiones que tengan que ver con la organización puertas adentro de las compañías. En cambio, mencionó factores como el terrorismo, que si bien en América Latina no es tan fuerte (8%), sí toma importancia en el relevamiento mundial. Entre las tendencias que comenzaron a surgir a partir del año pasado fue la necesidad de incorporar planes de contingencia y sistemas de detección de posibles fallas, para estar preparado ante eventuales catástrofes o incidentes, o prever una acción que evite un desastre informático.