Las 24 cámaras de videovigilancia repartidas en el casco histórico de la ciudad española de León, hicieron que se redujeran los actos vandálicos contra el patrimonio. Así, en el último mes se registraron tres atestados, entre delitos y faltas, frente a los 80 del primer año de funcionamiento del sistema de videovigilancia.
Así las cosas, las cámaras de seguridad y de control de acceso custodian el casco histórico de León, controladas desde una sala de la Policía Local: 9 cámaras en las entradas controladas por los bolardos de la ciudad antigua, 14 en los puntos de mayor afluencia de tráfico, 21 en el casco histórico y tres en el entorno del cuartel.
Los objetivos de las cámaras enfocan a las principales plazas y calles del casco histórico y ofrecen un ángulo de 360 grados, calidad de imagen y zoom que permite acercarse y buscar el detalle. La grabación queda registrada en la memoria del sistema, que emite un aviso cuando detecta una anomalía.