El gobernador de Massachusetts, EE.UU, aprobó medio millón de dólares en subvenciones para 27 departamentos de policía para la adquisición automatizada de lectores de placas que se montan en la parte superior de coches patrulla. Estos lectores permiten a un coche patrulla conducir a través de un área y estar alerta si se identifica una placa en una lista de marcado.
Cabe destacar que ahora el almacenamiento masivo de datos y la comunicación inalámbrica permiten preservar la gran cantidad de datos generados. Además, las bases de datos pueden ser unidas entre sí, lo que permite a la policía vigilar a delincuentes conocidos, así como identificar a aquellos que están violando la ley, como por ejemplo los conductores no asegurados.
Mientras que un par de departamentos de policía ya tiene algunos de los lectores de datos, una política a nivel estatal para el manejo y depuración de los datos es necesaria antes de que el sistema entre en pleno funcionamiento.