El correo electrónico de un agente de policía alemán ha sido la puerta de entrada para que un grupo de hackers llamados n0n4m3 cr3w (noname crew) hayan conseguido entrar en el sistema Patras, utilizado para el seguimiento de sospechosos mediante el uso de dispositivos SMSs y GPS colocados en vehículos. Todo empezó con un asunto doméstico: un policía de Frankfurt am Main instaló un spyware en el ordenador de su hija para controlar sus actividades en internet. Uno de los amigos de la chica descubrió este software y, como venganza, entró en el ordenador del padre, donde encontró e-mails confidenciales que permitían el acceso a Patras.
Según informa Der Spiegel, el policía había redirigido los correos electrónicos del trabajo al ordenador de su casa. De todos modos, todavía se está investigando si el ataque del grupo n0n4m3 cr3w responde únicamente a este incidente o tuvieron otras vías para entrar en el sistema.
El artículo en inglés que les presentamos ofrece más información sobre este caso que demuestra la vulnerabilidad de los sistemas de seguridad a los ataques de hackers. En este caso, por falta de controles de acceso y la imprudencia de un trabajador.